El ritmo es uno de los elementos que todo guitarrista debe saber manejar a la perfección. Gracias a este componente, las diferentes partes que hacen una pieza musical se organizan y coordinan para ejecutar sus sonidos en el momento y orden adecuados. A continuación, te presentamos algunas sugerencias para mejorar tu ritmo de guitarra.
La rítmica de un guitarrista, que no es más que la ejecución de los acordes de forma precisa y en el tempo exacto en el que una composición lo requiere, depende de muchas aristas. Por supuesto, la técnica y los conocimientos que el individuo posea para tocar son fundamentales.
No obstante, también hay muchos otros que influyen. Por ejemplo, si se toca con acompañantes, la coordinación entre las partes es vital para que nadie pierda el hilo, musicalmente hablando.
Del mismo modo, los nervios pueden jugar una mala pasada. A menudo, la inseguridad acaba provocando prisas o pausas en momentos indebidos. Esto puede llevar a una confusión de la que es difícil salir. Sin embargo, siempre es bueno contar con ejercicios y trucos para trabajar el ritmo de guitarra. Aquí presentamos algunos muy útiles.
Consejos para mejorar tu ritmo de guitarra
Practica con el metrónomo
Este elemento, del cual hemos hablado en artículos anteriores, es verdaderamente útil tanto para los aprendices como para los guitarristas avanzados. Dado que lo podemos configurar en la velocidad —el tempo— que deseemos, es posible practicar con él los mismos acordes de diferentes maneras, algo que sin dudas ayuda a mejorar la habilidad de las manos.Para este ejercicio, lo que se suele recomendar es comenzar con una velocidad lenta —por ejemplo, a 40 bpm—, y luego ir aumentado a medida que la ejecución va mejorando.
Cabe mencionar que no es necesario salir corriendo a la tienda a conseguir uno. Hoy en día, la tecnología puede darte una mano: descarga aplicaciones en tu celular que cumplan esta función, o bien escribe "metrónomo" en Google para utilizar esta herramienta que el mismo buscador te ofrece de forma gratuita.
Contar
Vendría a ser algo muy similar a lo que hacemos con el metrónomo, pero "manualmente". Lo que tenemos es que hacer es contar —en voz alta o baja— a medida que se pulsa cada nota.Por básico que parezca, el ejercicio de numerar las notas a la vieja usanza "1,2,3,4..." te permitirá ubicarte mejor y respetar el tempo al que venías tocando. Hacerlo en voz alta y escucharte hace que representes mejor en tu mente la consecución de los acordes.
Una técnica que muchos guitarristas aplican es la de llevar este conteo con un movimiento del pie, como si se golpeara el pedal de una batería imaginaria. Esto es sumamente útil, ya que también tienes la posibilidad de adherir una panderete o un stonbox para transformar ese movimiento en un sonido de percusión que te acompañe.
Ya habrás notado que la coordinación entra en juego cuando hablamos del ritmo de guitarra. Por lo tanto, debemos ser constantes y practicar a conciencia hasta que la cosa comience a fluir.
Tocar con otras personas
Como mencionamos antes, el ritmo es un componente fundamental e indispensable para la coordinación entre los participantes en la ejecución de una pieza musical. Así como el metrónomo puede ayudar a practicar en solitario, tocar con otras personas también es un trabajo sumamente aconsejable.Sean otros guitarristas o músicos que tocan otros instrumentos, el ejercicio de seguirse unos a otros —incluso con errores y desaciertos— hará que todos mejoren. Por un lado, tendremos que ser constantes y cumplir con el tempo para no perder el hilo del resto de los compañeros; por el otro, aprenderemos a salir una situación complicada cuando se produzcan desarreglos.
Cantar y tocar a la vez
Para mejorar el ritmo de guitarra, también puede ser muy útil tocar y cantar a la vez. Se trata de una prueba máxima para la capacidad de coordinación. No te asustes ni te frustres si al principio no logras los resultados deseados; verás que, con perseverancia, lograrás hacer las dos cosas a la vez sin perderte.Además de estas sugerencias, desde luego que puedes recurrir a otros métodos que te resulten efectivos. Por ejemplo, muchas personas se sienten más cómodas con un instructor que los guíe. Otros, en tanto, tienen la dichosa capacidad de aprender a tocar aprendiéndose canciones.
Sea cual fuere la alternativa que escojas, de seguro estos consejos te van a servir. Para concluir, no olvides que puedes encontrar muchas otras recomendaciones y secretos del ritmo de guitarra y otros aspectos de este bello arte en los cursos en línea de Amós Lora, un joven prodigio de la música flamenca. ¡No te lo pierdas!
