Hemos hablado en varias ocasiones de lo útil que puede ser tocar la guitarra de a dos, ya sea para practicar o para presentarse en público. Desde lo musical hasta lo personal, incluyendo muchos otros aspectos de la vida de un músico, formar un dueto de guitarra puede ser la mejor manera de disfrutar esta pasión.
Que haya dos guitarristas tocando juntos amplía considerablemente el abanico de posibilidades; esto, desde luego, da mayor calidad y diversidad a las interpretaciones que puedan hacer juntos.
Claramente, ambos guitarristas no van a ejecutar las mismas notas y acordes en la mayoría de los casos; cada uno de ellos deberá ocupar un rol dentro del dúo para potenciar el producto final. En el siguiente artículo, repasaremos algunas nociones elementales para la conformación de un dueto de guitarra, así como las ventajas de hacerlo.
¿Por qué es positivo formar un dueto de guitarra?
En primer lugar, para quienes están comenzando apenas su carrera musical, o incluso si estáis aprendiendo a tocar la guitarra, practicar con alguien hará todo más llevadero. Ambos podrán aprender de la técnica del otro, y también contarán con un observador que les señalará lo que haga falta mejorar.
La amalgama de dos músicos no es una tarea sencilla; cada uno traerá consigo su intensidad para tocar. También es probable que uno vaya más acelerado que otro, por lo que requerirá de muchas horas de práctica hasta que los esfuerzos comiencen a tomar forma.
Variedad de recursos
Más allá de eso, a la hora de tocar, un dueto de guitarra puede otorgarle a quienes lo conforman la chance de adoptar diferentes papeles en cada pieza musical. Por ejemplo, está la posibilidad de que ambos ejecuten una misma melodía con una pequeña variación, como hacen bandas de rock como los Guns N’ Roses o AC/DC.
Asimismo, está la alternativa de que uno toque acordes más largos o usando técnicas específicas mientras el otro lo hace de manera más melódica; este último puede ocuparse, por ejemplo, de seguir la melodía del cantante, si es que lo hay.
Muchos critican esta idea por el hecho de que la guitarra melódica no se luce para nada, y hasta podría reemplazarse por otro instrumento, como ser una flauta o un violín.
Del mismo modo, en géneros musicales como el rock o el heavy metal se acostumbra a que una guitarra suene ‘limpia’ mientras que a la otra se le aplica cierta distorsión. Se lo suele denominar ‘diferenciación por timbre’.
Esto, a su vez, puede combinarse con el uso de técnicas como el palm mute o la ejecución de los mismos acordes, pero en diferentes registros, ya sea más arriba o más abajo.
Finalmente, por supuesto que tenemos la opción de que los dos guitarristas toquen lo mismo. Esto da mucha fuerza a ciertas partes —como el estribillo—, pero debe haber un buen trabajo de coordinación para que el sonido sea lo más uniforme posible.
Complemento rítmico, una gran forma de armonizar dos guitarras
Para sacarle el máximo rédito a un dueto de guitarra, nada mejor que alcanzar un punto en el que ambas se complementen a la perfección. Una técnica que te puede acercar a este objetivo es la del complemento rítmico, muy característica de la histórica banda de rock The Rolling Stones.
Consiste en ‘rellenar’ los huecos que deja una guitarra —que normalmente sigue una melodía determinada— para completar el sonido y dotarlo de mayor calidad. A veces basta con un punteo para meter el bocadillo perfecto entre los acordes. ¿Te animas a intentarlo?
Otra alternativa es trabajar con subdivisiones rítmicas. Esto quiere decir que, si una guitarra toca en corcheas, la otra puede seguir semicorcheas para agregarle otra dinámica al sonido.
Apoyo psicológico
Más allá de todo lo comentado previamente, hay un aspecto que no podemos dejar de lado. Formar un dueto representa para muchos músicos principiantes una puerta de ingreso a un mundo que difícilmente exploren por sí solos.
Tener a alguien al lado que comparta los nervios y la ansiedad, nos dé una mano con todos los preparativos previos a una presentación y nos ayude a dar nuestra mejor versión es indispensable para muchos. Sin dudas, además de todo lo que aporta en la arista musical, tener otro guitarrista a nuestro lado es un recurso muy preciado.
Aprende más de la mano de Amós Lora
En definitiva, al formar un dueto de guitarra podremos sacar partido de varios de sus beneficios. Además, creceremos como músicos, aprenderemos nuevas técnicas y estilos y, por sobre todo, sabremos cómo adaptarnos a otros instrumentos. Esto puede ser un recurso básico si deseas seguir una carrera como profesional.
Si hay alguien que puede instruirte en el mundo de la guitarra y sus posibilidades, es Amós Lora. Pese a su juventud, este guitarrista flamenco español ha tocado con grandes referentes de su género. Puedes aprender de sus lecciones en este curso en línea; ¡no te lo pierdas!
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